Si hay algo que define a la Revolución Bolivariana son los logros sociales que han beneficiado a la clase obrera y campesina venezolana. El pueblo organizado y el gobierno han logrado garantizar la supervivencia de las misiones revolucionarias a pesar de una férrea guerra económica, que ha tenido graves consecuencias para la distribución de productos básicos para el pueblo.
Uno de los más importantes logros de la Revolución Bolivariana es sin duda la Misión Vivienda. Esta misión cerró en Diciembre del 2018 con un total de 2.500.000 viviendas construidas por y para el pueblo en los 7 años desde su andadura. Una misión fruto de la puesta en marcha de políticas articuladas entre el Gobierno Nacional, el pueblo organizado, empresas nacionales y alianzas internacionales. Esta realidad contrasta con la problemática que atravesamos en el capitalismo; desahucios, subidas abusivas del alquiler, beneficios fiscales y legales para los fondos buitre, expulsión de vecinas en barrios populares.. Para el Gobierno Bolivariano la vivienda es un derecho constitucional, tal y como viene reflejado en el Artículo 82 de la Constitución:
“Toda persona tiene derecho a una vivienda adecuada, segura, cómoda, higiénicas, con servicios básicos esenciales que incluyan un hábitat que humanice las relaciones familiares, vecinales y comunitarias. La satisfacción progresiva de este derecho es obligación compartida entre los ciudadanos y el Estado en todos sus ámbitos.”
Una de las consecuencias más graves que ha tenido la guerra económica ha recaído sobre la distribución de medicamentos. Ante ello, el Gobierno inició el programa “0800 Salud Ya” un centro de llamadas dirigido a la atención de pacientes que permitía el registro y distribución gratuita de medicamentos. A esta iniciativa se le suma la red de salud pública, que cuenta actualmente con 26 mil 545 centros de atención médica en el territorio nacional, donde ofrecieron 127 millones 168 mil consultas en Barrio Adentro, la misión socialista que llevó centros de atención médica allí donde no había y con la colaboración solidaria de Cuba, que ha aportado 142.000 colaboradores a esta misión desde su creación hace 15 años formando a 26 mil médicos integrales comunitarios, de ellos 12 mil médicos generales integrales, y están llegando los primeros especialistas formados en Cuba. Esta red está creando, además, planes especiales de vacunación, de asistencia a mujeres embarazadas,…
Existe algo significativo que define a Venezuela como Bolivariana, la Misión Milagro, que iniciaron el Comandante Fidel y el Presidente Chávez el 8 de Julio del año 2004 y que proporciona el acceso a cirugías gratuitas para enfermedades oculares a pacientes de bajos recursos. Esta misión atiende además a pacientes en Latinoamérica en donde se han practicado cerca de tres millones de intervenciones.
La garantía sanitaria venezolana, resalta en contraposición con el modelo sanitario español, que niega la asistencia sanitaria a migrantes, haciendo gala de su racismo institucional, que permite también las muertes en el mediterráneo y el abandono a su suerte a barcos llenos de migrantes que huyen de la barbarie creada por Europa y Estados Unidos para el aprovechamiento de sus recursos naturales, en beneficio de grandes empresas, políticos corruptos y la mafiosa monarquía española.
Todo ello promoviendo la privatización de la sanidad, las condiciones de explotación y falta de recursos para la investigación para el personal sanitario, que sigue batallando por garantizar la sanidad universal y de calidad. El reconocimiento a la trayectoria de la República Bolivariana de Venezuela en materia educativa, la ha llevado a ser representante de los Objetivos para la Educación 2030 ante la Unesco. Y es que según esta institución, Venezuela es el segundo país de Latinoamérica, detrás de Cuba, con la mayor matriculación universitaria. Es destacable la participación protagónica de los maestros y maestras en las Misiones Robinson, Ribas y Sucre. Dentro de las iniciativas socialistas del gobierno en materia educativa existe también la entrega gratuita de libros, ordenadores y material escolar, ha construido miles de escuelas, barrios universitarios y más de 40 universidades en el país. Todo ello explica el por qué la Unesco declara a Venezuela como país libre de analfabetismo, logrando en menos de 10 años de Revolución, alfabetizar al 95,2% de la población que no tenía ningún tipo de enseñanza.
Mucho tendría que aprender el gobierno español del “Enseñen, y tendrán quien sepa; eduquen, y tendrán quien haga” que dijo el ilustre venezolano Simón Rodríguez, homenajeado por el Comandante Chávez con la Misión Robinson. Lo que para el gobierno bolivariano es una prioridad, en el estado español se ha convertido en un negocio que sólo garantiza el acceso a la Educación a unos pocos, fomentando la educación concertada y haciendo inaccesible la Universidad para muchos jóvenes de la clase obrera.
Frente a la españa de la explotación laboral, la impunidad de las grandes empresas con presencia internacional, la falta de poder adquisitivo de los pensionistas y todos los ataques que sufren hombres y mujeres de la clase obrera en el capitalismo, el Presidente Obrerista Nicolás Maduro, ha seguido la estela del Comandante Hugo Chávez, que en los últimos 19 años ha decretado 43 subidas de salarios para trabajadores en activo, pensionados y jubilados. Otras conquistas de la Revolución Bolivariana para la clase obrera son la reducción de la jornada laboral a 40 horas diurnas semanales, el pago doble de liquidaciones en caso de despido, la eliminación de la tercerización laboral,..Entre todas destacan también las políticas concretas hacia las mujeres para las que se ha extendido el permiso pre y post natal a hombres y mujeres, la inamovilidad permanente para padres y madres de personas con discapacidad con alto nivel de dependencia y la consideración de violencia machista al abuso sexual en el trabajo. Todo ello fruto de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, escrita con lenguaje inclusivo, que en su artículo 88 cita:
“El Estado garantizará la igualdad y equidad de hombres y mujeres en el ejercicio del derecho al trabajo. El Estado reconocerá el trabajo del hogar como actividad económica que crea valor agregado y produce riqueza y bienestar social. Las amas de casa tienen derecho a la seguridad social de conformidad con la ley.”
Por todo ello, es necesario que ahora que la Revolución Bolivariana está amenazada por un golpe de estado perpetrado por los EEUU y apoyado por el gobierno imperialista español, nuestra lucha contra cualquier tipo de injerencia hacia Venezuela es también vital para la clase obrera mundial por la conquista de los derechos sociales y laborales que ha logrado el pueblo venezolano y el gobierno en su Revolución.
¡Defendamos la Revolución Bolivariana y la legitimidad del Presidente Nicolás Maduro por dignidad internacionalista y obrera!
