Hubiéramos preferido ver a nuestros valientes muchachos del Ejército español bailando el Harlem Shake en Afganistán, pero no ha sido así. El vídeo que recientemente ha publicado el diario «El País», nos muestra a un grupito de macarras uniformados pateando la cabeza de un prisionero iraquí. No sabemos que habrá sido de aquél pobre hombre, pero nos queda la tranquilidad de saber que el Gobierno va a investigar las “deplorables imágenes”.
Diego López Garrido, portavoz de Defensa del PSOE, no ha perdido un minuto para señalar al ex presidente José María Aznar y volver a criticar la guerra ilegítima de Irak, puntualizando que “el ejército es el primer interesado en que este caso se aclare cuanto antes, porque no debe empañar la forma impecable en que se han conducido los militares españoles en el exterior”.
Cualquiera diría que López Garrido hubiera supervisado personalmente las operaciones del Ejército español en el exterior, incluso las llevadas a cabo en la guerra de Irak ¿Cómo se puede conducir de forma impecable una guerra ilegítima? ¿La guerra es ilegítima pero la conducción es impecable?
En los últimos años nos hemos acostumbrado a ver vídeos y más vídeos de antidisturbios golpeando injustificadamente a manifestantes. Hostias gratis, bofetones, insultos y humillaciones que han sido registradas por multitud de cámaras de vídeo. Sociópatas con porra y pistola, cuyo sadismo es recompensado con la impunidad más absoluta.
Ciertamente, dudo que el señor López Garrido haya vivido en primera persona la actividad militar española en Irak o Afganistán, él sabrá lo que hace al poner la mano en el fuego, pero una cosa sí le puedo decir, y es que somos much@s quienes, durante los últimos años, hemos vivido en primera persona la violencia policial, los golpes injustificados, las humillaciones, los insultos e incluso la tortura. Y lo peor de todo es que, después de haber constatado esta realidad en primera persona, hemos tenido que escuchar a politiqueros de su calaña diciendo exactamente lo mismo que dice ahora: “la actuación de la policía se ha conducido de forma impecable”.
No se haga usted el inocente, señor López Garrido. Es usted tan culpable como Aznar, y Aznar es tan culpable como Felipe González, porque estos sociópatas armados son obra de ustedes, ustedes les han dado carta blanca, y estos vídeos sólo son la punta del iceberg de un Ejército y unas Fuerzas de Seguridad del Estado que llevan la práctica de la tortura en su código genético. Ustedes y su criminal sistema capitalista son los responsables. No se hagan ahora los sorprendidos.
