Al finalizar la segunda guerra mundial la ONU creó un comité especial para acabar con todas las colonias europeas fuera del territorio de Europa. Es así como se empiezan a producir los movimientos de liberación de África promovidos por guerrillas armadas que exigen el cumplimiento de lo acordado en la ONU. Así se libera el Congo, Argelia, el Congo Brazzaville (ex Congo francés) y posteriormente las colonias portuguesas.
Francia unifica todas sus colonias en África bajo el nombre de África Occidental Francesa con la excepción de Argelia. Pero esa descolonización nunca fue en serio y al día siguiente de la falsa descolonización comenzó una recolonización de África. A efectos de esa recolonización Francia crea para sus ex colonias un mercado común de África del Sudoeste, con una moneda única que es el franco africano (franco CFA) ,que mantiene un cambio fijo con el euro de 655 francos CFA por un euro. De esta manera Francia controla la economía de los 15 países del mercado común africano mas Guinea Bissau.
Al sur de Argelia, antigua colonia francesa, existe una gran planicie abrasada por el sol que encierra a dos países: Níger y Mali. En los dos hace un calor abrasador, y su suelo es absolutamente estéril para la agricultura aunque permite alguna ganadería de ganado menor. Pero en ambos, el subsuelo es riquísimo, ya que tiene abundancia de petróleo, coltán, oro, diamantes y sobre todo uranio. Precisamente Francia depende mucho de este metal, ya que prácticamente toda su electricidad se produce en centrales nucleares. A raíz de esto Francia mantiene un gobierno títere en Mali, que sostiene una larga y cruel guerra contra una guerrilla bien armada y entrenada y de ideología islamista que ha puesto en jaque al gobierno títere y pone en serio peligro el control francés del uranio. Este es sin la menor duda el motivo de la intervención del ejército francés en Mali.
Los islamistas no son de Al Qaeda, son una guerrilla islámica, que es la religión mayoritaria de los malienses y, en este caso, la religión sirve como un elemento identitario en la lucha del pueblo maliense por su liberación y su dignidad. La propaganda imperialista francesa y el silencio cómplice de la UE y de la OTAN están encubriendo un nuevo crimen de los colonialistas franceses, esta vez bajo la batuta del «socialista» Hollande.